Los primeros
auxilios, son medidas terapéuticas urgentes que se aplican a las víctimas de
accidentes o enfermedades repentinas hasta disponer de tratamiento
especializado. El propósito de los primeros auxilios es aliviar el dolor, la
ansiedad, y dar apoyo psicológico y así evitar el agravamiento de su estado. En
casos extremos son necesarios
para evitar la muerte hasta que se consigue asistencia médica.
¿Cómo actuar…?
Saber lo que no se debe hacer es tan importante como saber qué hacer, porque
una medida terapéutica mal aplicada puede producir complicaciones graves, es
por eso que si no sabemos, aunque se quiera colaborar, debemos esperar por
personas y equipo especializado, siempre es importante actuar con serenidad y
profesionalismo.
Importancia
Puede ser la diferencia entre la vida y la muerte, entre invalidez temporal o
permanente, entre recuperación rápida y hospitalización.
¿Por qué es importante conocer
de ellos….?
La persona que sabe sobre primeros auxilios siempre va a ser una persona de
mucha utilidad para la sociedad, un simple procedimiento como abrir las vías
aéreas (nariz, boca, tráquea, pulmones) de la víctima puede salvarle la vida
mientras se espera la llegada del equipo de emergencias. Una vía aérea bloqueada
puede matar a alguien en
3 o 4 minutos, pero una ambulancia puede demorar más de 30 minutos en llegar. Es
más probable que se tenga que administrar primeros auxilios a alguien que se
conoce, que a extraños. Saber qué hacer en estos casos permitirá actuar rápido
si un accidente sucede.
Algunos de los accidentes
más frecuentes:
- Caídas
- Choques y colisiones
- Fracturas
- Cortaduras
- Quemaduras
- Atragantamientos
- Infarto agudo al miocardio
¿Cómo actuar ante las emergencias
más comunes?
Siempre es importante saber qué hacer y qué no hacer ante una situación de
emergencia, a continuación algunos consejos sobre ciertas situaciones en las
que de presentarse, podríamos participar o colaborar con personal de más
conocimientos:
GOLPE DE CALOR
La víctima de un golpe de calor debe ser transportada a un lugar fresco a la
sombra, y allí debe guardar reposo con la cabeza elevada. Se debe humedecer el
cuerpo con alcohol o agua fría para bajar la temperatura y el enfermo debe ser
trasladado a un hospital de inmediato. El paciente con deshidratación por el
calor también debe guardar reposo, pero con la cabeza más baja que el cuerpo;
conviene proporcionarle abrigo o calor. Al principio puede presentar náuseas,
pero tras un tiempo de descanso puede ingerir líquidos.
QUEMADURAS
Se producen por exposición al fuego, a metales calientes, a radiación, a
sustancias químicas, a la electricidado, en general, a cualquier fuente de
calor como el sol. La finalidad de los primeros auxilios en los quemados es
prevenir el shock, la contaminación de las zonas lesionadas y el dolor. La
aplicación de bolsas de hielo o
la inmersión en agua helada disminuye el dolor. Después se ha de cubrir la zona
con un apósito grueso que evite la contaminación. No se deben utilizar curas
húmedas, pomadas o ungüentos, y hay que acudir al especialista médico inmediatamente.
Las quemaduras del Sol pueden ser de primer o de segundo grado. Sus casos leves
se pueden tratar con una crema fría o un aceite vegetal. Los casos graves
convienen que sean atendidos por un especialista.
ESGUINCE Y FRACTURAS
Tanto el esguince como la fractura se acompañan de gran dolor e inflamación,
pero la impotencia funcional (incapacidad para mover la zona afectada) y la
deformidad son propias de las lesiones óseas. Hasta que se descarte una
fractura, los esguinces graves
se deben tratar como lesiones óseas; sólo la radiografía puede confirmar el
diagnóstico. La incorrecta manipulación de un miembro fracturado puede hacer
que los picos y biseles de la fractura desgarren arterias, venas o nervios.
Sólo se debe inmovilizar el miembro en la posición en que se encuentra,
preferiblemente con férulas. Éstas se pueden improvisar con tablas o cartón y
afianzarlas al miembro con tiras de tela y por último trasladar al paciente a
un Centro Hospitalario.
HEMORRAGIA
Una hemorragia es el sangrado de cualquier vaso sanguíneo dañado. Causada por
accidentes o enfermedades, la hemorragia se describe como "externa"
si la sangre se pierde en el exterior del cuerpo, e "interna" si la
sangre se retiene dentro. el mejor método es la aplicación de presión directa.
Lo ideal es utilizar compresas quirúrgicas estériles, o en su defecto ropas
limpias, sobre la herida y aplicar encima un vendaje compresivo. Cuando este
apósito se empapa de sangre no debe ser retirado: se aplican sobre él más
compresas y más vendaje compresivo. Si el sangrado de una extremidad es muy
abundante se puede aplicar presión sobre el tronco arterial principal para
comprimirlo sobre el hueso y detener la hemorragia.
LIPOTIMIA
La sudoración fría y la palidez son típicas de la lipotimia, desmayo o
desvanecimiento. Se produce por un aporte insuficiente de sangre al cerebro y
es temporal. Para restaurar la circulación cerebral se elevan los miembros
inferiores o se sitúa la cabeza más baja
que el corazón. Es necesario evitar que la víctima se enfríe.
Los primeros auxilios se deben limitar a mantener tranquilo y cómodo al
paciente, buscando ayuda médica más avanzada o especializada.
La próxima semana: Conozca el protocolo para llamar al 9-1-1